lunes, 26 de octubre de 2009

Empecemos desde el principio... yo y la Radio (1)

Siempre me entusiasmó el tema de la Radioafición.


Desde pequeño, recuerdo oir por la Tele como nombraban a un radioaficionado que estaba en contacto con un montanero español, y me faltaba tiempo para ir corriendo a verlo. O escuchar también por la tele como tras unas inundaciones se hablaba de que los Radioaficionados habían ayudado con sus equipos.


Me llamaba la atención la electrónica, y pronto empecé a desguazar aparatos electrónicos (lógicamente solo consiguiendo montones de piezas sin mas…) y a jugar con la electricidad. Por un breve momento pude tener un walkie de 27 Mhz y jugar, pues de eso se trataba, con la posibilidad de hablar por radio.


En ratos perdidos, con una radio que tenía Onda Larga, escuchaba y me afanaba en apuntar puntos y rayas de transmisiones que se me antojaban misteriosas. Tardaria muchos años en volver a escucharlas y en entender que se trataba de balizas automaticas.


Pero está claro, los años pasan y uno va dejando poco a poco de ser tan pequeño. Corría posiblemente el año 1982 cuando empecé a jugar mas en serio con la electronica de manos de la revista Elektor. Poca cosa, pero la afición seguía allí. Unas buenas notas en clase me permitieron por primera vez tirar del destino hacia mi: conseguí convencer a mi padre de que me comprara unos kits de electronica para montar un emisor-receptor de 27 Mhz.


Tras unos meses de montaje terminé con una serie de placas montadas… y sin funcionar. La falta de conocimientos reales terminó por provocar que dejara los kits de CarKit aparcados en un rincón, donde estuvieron unos meses abandonados por completo. Volvería en el futuro sobre el.


Como para llenar ese vacío de tener en la punta de los dedos la radio, y no poder conseguir nada más, descubrí casi por accidente la escucha de emisoras de radio en la Onda Corta. Con un receptor “musiquero” (o sea un aparato domestico que tenía cobertura para escuchar Onda Corta en AM) empecé a escuchar las emisoras de radiodifusión de otros países, en sus emisiones en Castellano. Pronto empezaron a llegar cartas a mi casa provenientes de Praha, Paris, Holanda… y calendarios de Radio Beijing, tarjetas de la Voz de America y postales como las de Radio Barquisimeto (Venezuela). Pronto un agujero en el marco de la ventana me permitió tirar diez metros de hilo de cobre hasta el extremo del patio de la casa de mis padres, y la recepción mejoró. Pasé horas y horas escuchando todo tipo de emisoras, y de vez en cuando, cerca de segmentos con marcas de “41 metros” escuchaba extraños ruidos que parecían voces de personas, pero no conseguía entender. Estaba escuchando en AM señales de banda lateral, pero yo desconocía aquello en esos momentos.


Ocurrio entonces, creo recordar que sobre 1984, un par de cosas que cambiaron para siempre mi vida: la primera fue la aparición de una enciclopedia en fascículos llamada Radioafición y CB, la segunda fue la oportunidad de hacer un programa de radio en una emisora de FM Libre de El Prat de Llobregat llamada Radio Mediterranea.


(Continuará)

1 comentario:

  1. Hola Juan Carlos,

    Mi nombre es también Juan Carlos, aunque a mi para abreviar me llaman Carlos.

    Ante nada, un saludo. Aunque ahora no tengo licencia, no digo fui radioafiocionado, lo sigo sintiendo aún no la practique por lo menos desde hace 14 años.

    Tenia indicativo EB3FAF, sigo conservando el diploma de operador, supongo no costaría nada volver al micro, sería más insuperable el poder instalar una antena, y
    quizá no ya culpa de los vecinos (que ya es una montaña) sino que ni siquiera esta finca tiene terraza o accesos comunes al tejado.

    Es un desastre el tema de las antenas, hace unos 15-20 años, ante el evidente desplome de las licencias desde 1995-96 (cenit de los años dorados de la radio)
    se empezó a discutir de las causas, por entonces eran el "infovia y los móviles" pero yo creo que es más grave el problema de la instalación de una simple antena.

    En fin! te ruego disculpas, todo esto es redundante, como si deseara justificar ante un colega de afición porque estoy alejado de la radio. Y en realidad no lo es,
    del microfono si, pero no del espiritu, supongo que eso si lo tienes dentro es como para toda la vida.

    Disculpa otra vez, vamos al tema.

    Me he atrevido a escribirte estas lineas porque he visto tu posteo acerca del excelente libro de EA3PD, que lo solicita un EA7 y tu respuesta también interesándote.

    Permiteme que lo ponga en mayúsculas ESE LIBRO ES UNA JOYA!.

    Tengo algo de formación técnica en electrónica por mis estudios, en radio nunca llegué a comprender más allá de los bloques de un transceptor hasta el libro del Sr.
    LLaurado. Desde la recepción en AM hasta la construcción, si se desea, de un completo transceptor en SSB. No es nada eso. Cierto que no hay nada de tecnologia
    digital, pero pienso que un aficionado, antes del sistema modular que hoy reina en la radio, al igual que otras disciplinas, en que nos hemos convertido en simples
    usuarios, deberia estudiar un libro tan CLARO, tan comprensible, tan paso a paso, con una gran dosis de pedagogia cuyo resultado es una completa comprensión de
    lo que es una radio, y una base muy sólida para ir más allá. Aparte las peculiaridades como OM de EA3PD, como amar el QRP y sentir que estas ante la presencia
    de un radioaficionado, si se quiere de los de antes, pero ante todo con un maestro.

    En fin! me cansaría de alabar esa espléndida obra de EA3PD. Bien, yo dispongo de ese libro, como sea que estoy trasladando mi biblioteca del papel a los bits,
    te ofrezco el libro, que puedes quedartelo, sólo pidiendo si lo puedes digitalizar. Por supuesto a tu ritmo, son muchas páginas e imagino que no se puede hacer en un dia.

    Un gran saludo, por supuesto esta propuesta, sin ningun tipo de compromiso. También estoy seguro que la difusión de obras como este magnifico libro, pueden ayudar a nuestra un poco maltrecha afición.


    Carlos, durrutic@yahoo.es

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